Las protestas de los agricultores franceses por las nuevas medidas de carácter medioambiental y económico del Ejecutivo galo han ido creciendo en intensidad y violencia en los últimos días. Los bloqueos de autopistas y de vías de alta capacidad han sido una constante al sur del país, si bien las acciones de los manifestantes se han extendido por todo el país, provocando sin ir más lejos el bloque de los accesos al Puerto de Calais. Con todo, los movimientos de los últimos días quedan en nada ante lo que ya se puede definir como ‘viernes negro’.
Tal y como adelantaban los sindicatos agrícolas de Îlle de France, los bloqueos en las vías de acceso a Francia en la frontera con España son numerosos, en gran medida por la acción de los viticultores de l’Aude, que han vuelto a paralizar el tráfico en el peaje de Narbona. De igual forma, los agricultores del resto del país están logrando paralizar el acceso a instalaciones de vital importancia para la economía del país y para el sector del transporte de mercancías por carretera. De hecho, en las últimas horas también se han bloqueado algunos de los accesos a París.
El sector del transporte de mercancías por carretera se ve atrapado en las protestas ya no sólo del sector agrícola, sino de los que se quieran unir a las mismas. De hecho, el sindicato CGT ha hecho un llamamiento a sus militantes para unir fuerzas con los trabajadores agrícolas con el fin de protestar contra otras medidas del Gobierno de Francia. Tanto es así que algunas voces dentro de la CGT no descartan que también se puedan realizar bloqueos en las refinerías de petróleo del país.
Ante esta grave situación, tal y como se viene alertando en los últimos días, la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM) ha hecho un llamamiento al Gobierno español para que tome cartas en el asunto, a la par que recomienda a los profesionales autónomos y empresas de transporte que modifiquen, retrasen o anulen sus rutas por Francia, ya que a los bloques de carreteras como la A-7, A-51, A-20, A-1 o A-9 se suman acciones violentas en los accesos a centros logísticos contra camiones extranjeros.