En 2023, más de 274,8 millones de toneladas de mercancías recorrieron las carreteras andaluzas, lo que representó casi el 14% del tráfico total en España. Este dato refleja un crecimiento superior al 5% en los últimos cinco años, destacando el gran potencial del mercado y la solidez del tejido empresarial en Andalucía.
Además, Andalucía se consolida como la comunidad autónoma con mayor volumen de transporte de mercancías dentro de su propio territorio. El 75% de los desplazamientos tienen origen y destino en la región, lo que demuestra la capacidad de su economía para abastecer a más de 8,6 millones de habitantes y a los 33,9 millones de turistas que recibe anualmente.
La Comunidad Valenciana, Extremadura y Murcia son los principales destinos de las mercancías que parten desde Andalucía, concentrando casi la mitad de los trayectos hacia otras regiones de España. En el sentido contrario, Castilla-La Mancha, Madrid y Comunidad Valenciana son las autonomías que más productos transportan a Andalucía, acumulando el 52% de los desplazamientos interregionales por carretera que llegan a suelo andaluz.
En el ámbito internacional, Andalucía se posiciona como la tercera comunidad española con mayor tráfico de mercancías por carretera hacia Europa. Sus exportaciones se dirigen principalmente a Portugal, Alemania y Francia, que representan el 60% de las ventas en el exterior. En cuanto a las importaciones, Portugal es el principal socio, concentrando el 35% de las compras, seguido de Francia, Italia y Alemania.
El análisis de los productos más transportados resalta la relevancia de la producción agroalimentaria andaluza, que es el principal motor de sus ventas tanto a nivel nacional como internacional. Este sector representa el 52% de las cargas hacia otras comunidades autónomas y aumenta hasta el 54% en las exportaciones hacia el extranjero.
La combinación de estos factores proporciona a Andalucía los recursos necesarios para consolidar su crecimiento y expandir sus horizontes comerciales. En este contexto, el transporte de mercancías por carretera se perfila como un aliado estratégico clave para cohesionar el territorio, garantizar el suministro a un amplio mercado de consumo y fortalecer la competitividad logística de un tejido empresarial dinámico, en constante búsqueda de nuevas oportunidades en España, Europa y el mundo.