Las discrepancias dentro del Consejo Europeo complican la aprobación de las 44 toneladas en transporte internacional. Los países con mayor tráfico pesado de tránsito no ven favorable el incremento de la MMA (masa máxima autorizada); tampoco se ha alcanzado un consenso sobre permitir mayor peso a los vehículos de cero emisiones, según ha publicado Fenadismer.
En la última reunión del Consejo Europeo de Transportes, bajo la presidencia belga, no se logró el consenso necesario para modificar la Directiva de masas y dimensiones. El informe presentado destaca que varios Estados miembros, especialmente aquellos con mucho tráfico de tránsito, temen que el incremento de la MMA de los camiones afecte negativamente su infraestructura vial y comprometa la seguridad, lo que dificulta alcanzar una posición común.
Después de la reunión del Consejo, quedó claro que aún falta mucho para lograr una posición común que permita avanzar a las negociaciones en el trílogo: con el Parlamento Europeo, que aprobó su propuesta en marzo (favorable a las 44 toneladas y los megacamiones en transporte internacional), y con la mediación de la Comisión.
Durante la reunión del Consejo, para encontrar un punto de acuerdo, la presidencia belga propuso «una distancia suficiente entre los diferentes ejes en los vehículos de cinco y seis ejes» para mitigar el impacto en la infraestructura, una fórmula vista positivamente por varios países. Sin embargo, otros Estados miembros sugirieron agregar ejes adicionales.
Por otro lado, algunos países apoyan elevar el peso máximo a 46 toneladas para todos los vehículos, sumando las cuatro toneladas en discusión y las dos toneladas adicionales para los vehículos de cero emisiones y temporalmente para los diésel.
Discusión sobre las ventajas para vehículos de cero emisiones Respecto a los vehículos de cero emisiones, se presentaron varias opciones para compensar el peso adicional de la tecnología utilizada. Varios Estados miembros no consideran viable permitir una carga sobre el eje motriz superior a las 11,5 toneladas, necesaria en algunas configuraciones de vehículos para soportar un peso extra de cuatro toneladas.
Una propuesta de compromiso que recibió cierto apoyo fue elevar el peso del eje motriz a 12 toneladas solo para los vehículos eléctricos de batería (como se propuso en España para alcanzar las 44 toneladas), pero la mayoría de los Estados miembros insistieron en limitarlo a 11,5 toneladas. Además, algunos Estados miembros no están dispuestos a permitir dos toneladas adicionales para vehículos de cero emisiones.
Otra cuestión pendiente es la circulación de megacamiones en tráfico internacional. La sugerencia de permitir requisitos técnicos u operativos específicos va ganando terreno, pero aún se deben negociar las condiciones. Se planteó permitirlo solo a vehículos Euro VI, con un bonus de toneladas adicionales para tecnologías de cero emisiones, incentivando así la adopción de estos vehículos en tráfico internacional.
También se discutió la cláusula de salvaguardia, que permite a los Estados miembros de la UE no adoptar parte de la normativa europea, bajo la supervisión y autorización de la Comisión, basándose en pruebas sobre problemas específicos causados por vehículos más pesados en su territorio.
Esta idea se introdujo para abordar las preocupaciones de varias delegaciones sobre el riesgo de un cambio modal inverso, donde mercancías transportadas por ferrocarril se desvíen a la carretera. Algunos Estados miembros también cuestionan por qué a partir de 2035 el margen de peso adicional de dos toneladas solo debería aplicarse a vehículos de cero emisiones.
Otra propuesta fue definir en qué carreteras de la Red Europea RTE-T sería viable permitir la circulación de vehículos más pesados. Para estudiar su viabilidad, los Estados miembros necesitarían tener una mejor comprensión de las condiciones de dicha red.
VIA: https://www.fenadismerencarretera.com/las-diferencias-dentro-del-consejo-europeo-complican-la-aprobacion-de-las-44-toneladas-en-internacional/