El acuerdo suscrito entre el Reino de España y el Reino de Marruecos para el reconocimiento de los carnets de conducir profesionales por parte del país contrario ha suscitado en las últimas semanas cierta controversia, ya que sobre el papel este pacto permite que los conductores con carnets profesionales expedidos en Marruecos puedan conducir directamente camiones y/o autobuses (según el carnet) sin necesidad de hacer ningún examen para la convalidación de su permiso. Sin embargo, esto no será del todo así, pese a los datos que han trascendido hasta ahora.

De hecho, la Dirección General de Tráfico se ha visto en la obligación de realizar una aclaración para explicar que la convalidación automática no existe ni va a existir, por lo que el acuerdo que se ha firmado entre el Reino de España y el Reino de Marruecos sólo es aplicable al examen teórico. En otras palabras, el acuerdo permite que un conductor con un carnet marroquí que quiera convalidar este permiso no tenga que realizar el examen teórico al que se enfrenta un conductor cuando se quiere sacar el carnet de camión o de autobús desde cero.

En todo caso, sí tendrá que llevar a cabo las pruebas prácticas de conducción vigentes en nuestro país para completar el canje del permiso de conducir y estar habilitado para ponerse al volante de un autobús o un camión con una licencia española. De esta forma, el acuerdo entre el Reino de España y el Reino de Marruecos no supone una medida excepcional y sí un pacto que equipara la relación entre ambos países en este aspecto a la regulación vigente en los convenios suscritos con terceros países.

Cabe señalar en cualquier caso que los conductores marroquíes ya tienen una gran presencia en el sector del transporte de mercancías y viajeros por carretera. De hecho, Marruecos es el principal país no europeo emisor de conductores profesionales que trabajan en empresas de transporte española, con una cuota de penetración del 25% entre los profesionales extranjeros. No por menor deja de ser notable la presencia de conductores ecuatorianos (17%), ucranianos (12%) y colombianos (7%).