El informe provisional de siniestralidad vial en el ejercicio 2023 presentado esta semana por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, dejaba como principal lectura a nivel general el estancamiento en el numero de personas fallecidas en carretera. Durante el pasado año han perdido la vida en accidentes de tráfico 1.145 víctimas mortales, tres menos que durante 2022. Además, durante 2023 se han registrado menos siniestros, aunque ha crecido el número de víctimas mortales pertenecientes a colectivos vulnerables, sobre todo entre los motoristas.
Dejando a un lado los aspectos generales y centrándonos en los datos que atañen en exclusiva al sector del transporte profesional por carretera, el informe de siniestralidad de 2023 refleja un importante descenso en el número de chóferes profesionales de camiones pesados -más de 3,5 toneladas- fallecidos durante el pasado ejercicio. En concreto, un total de 39 conductores de este tipo de camión han perdido la vida, por los 50 que lo hicieron en 2022. Con este descenso del 22% se mantiene así la tendencia a la baja en este guarismo.
Además, el informe del Ministerio del Interior y de la DGT también desvela una disminución en la siniestralidad en vehículos de menos de 3,5 toneladas de Masa Máxima Autorizada (MMA) dedicados al transporte profesional. En este caso se ha pasado de 14 a 8 fallecidos si se dibuja una comparativa entre 2022 y 2023, lo que implica un descenso del 43%. Asimismo, el número de accidentes con víctimas mortales en furgonetas también se han reducido de forma notable, con un descenso del 38% al pasar de 68 a 42 fallecidos.
En este sentido, los expertos en movilidad y transporte señalan que la disminución del número de conductores profesionales de camión pesado muertos en carretera y la tendencia a la baja que se dibuja en las estadísticas es un logro significativo en términos de seguridad vial. De hecho, desde 2012 hasta 2023, según datos de la DGT, el número de muertes de chóferes de camión de más de 3,5 toneladas ha disminuido un 34%. Dentro del ‘estancamiento’ en las cifras generales, el descenso de los siniestros con camiones pesados es un motivo de cierto optimismo.