La última operación ‘Truck & Bus’ llevada a cabo por los agentes de tráfico de las policías bajo el paraguas de ROADPOL ha arrojado datos bastante negativos. La campaña que se llevó a cabo entre los días 6 y 12 de noviembre ha servido para registrar un aumento del 18% en la tasa de infracciones en el transporte profesional por carretera, en el que se incluye la actividad del transporte de mercancías. En la operación conjunta en la que han participado 17 países se han controlado 245.500 camiones y 11.261 autobuses y autocares.
El control de estos más de 250.000 vehículos ha derivado en la detección y sanción de 38.689 infracciones, lo que dibuja una tasa de infracción del 26,23% entre los camiones dedicados al transporte de mercancías por carretera. Una cifra que supone un aumento del 18% respecto a la campaña de vigilancia de perfil y fechas similares que se llevó a cabo en 2022. Contrasta este dato con la tasa de infracción que se ha dado entre los autobuses y autocares dedicados al transporte de viajeros, puesto que en este caso ha sido del 6,96%, cifra muy inferior al 17% que se registró hace un año.
Jana Peleskova, comisaria jefa de la Policía de la República Checa y presidente del Grupo de Trabajo Operativo de ROADPOL ha señalado: «Para el transporte de mercancías por carretera se han encontrado en esta campaña una o más infracciones en 1 de cada 4 camiones que han sido controlados. Esto demuestra que el tráfico de mercancías representa un riesgo claro para la seguridad vial si no se lleva a cabo de la manera adecuada. Los agentes de policía europeos tienen un nivel muy alto de formación en los controles de tráfico, por lo que hay que llevar a cabo la actividad acorde a la ley».
En lo referente a los camiones, la mayoría de las infracciones se produjeron por incumplir la normativa de los tiempos de conducción o descanso y la manipulación del tacógrafo. Casi 10.000 conductores de camión condujeron su vehículo durante más tiempo del permitido sin respetar las pausas obligatorias. Dejando a un lado las infracciones técnicas por sobrepeso o por llevar la carga mal asegurada, preocupa que hasta 307 conductores circulaban bajo los efectos del alcohol y 106 bajo los efectos de drogas.