El VII Congreso y XLVI Asamblea General de ATFRIE ha cerrado sus puertas con una segunda jornada en la que, como es costumbre, se ha puesto el foco en distintas cuestiones sociales y laborales que rodean a la figura de los conductores profesionales de camión. Además de la celebración de una mesa redonda socio-laboral, la jornada ha contado con una conferencia económica / financiera a cargo de Don Iván Redondo. El evento se ha cerrado con el habitual acto de clausura a cargo del presidente de ATFRIE.
La segunda y última jornada del VII Congreso y XLVI Asamblea General de ATFRIE ha estado centrada en la mesa socio-laboral que ha planteado distintas cuestiones en torno a la figura de los conductores profesionales de camión. Mesa redonda en la que han participado Don Diego Buenestado (UGT), Don Francisco Vega Rosado (CC.OO.), Don José Manuel Pardo (ASTIC – IRU), Don Roberto Parrillo (presidente ETF) y Don Oleg Kamberski (IRU), así como el vicepresidente de ATFRIE, Don Pedrto Conejero.
En esta mesa redonda se han tratado diversos temas como el acceso a la actividad, así como la situación general de la misma. En este sentido, los citados participantes han puesto de relieve la necesidad de adaptar el acceso a la profesión para que los conductores de camión puedan comenzar a trabajar desde los 18 años, situación que aliviaría la escasez de chóferes. A su vez también se ha tratado la prejubilación de los conductores, así como la necesidad de crear un convenio colectivo nacional para acabar con el sistema actual con 52 convenios colectivos, uno por provincia.
Tras la conferencia económica / financiera que ha protagonizado Don Iván Redondo, el VII Congreso y XLVI Asamblea General de ATFRIE ha cerrado sus puestas con el tradicional acto ed clausura. Como es normal, al frente de este acto de clausura ha estado Don José María Arnedo como presidente de ATFRIE, así como Don Jaime Moreno García-Cano, director General de Transporte. Como ya ha sucedido en anteriores ediciones, el responsable del Ministerio ha participado del evento para poner el broche perfecto al mismo.