Pere Navarro, responsable de la Dirección General de Tráfico (DGT), ha confirmado durante la jornada ‘Somnolencia y Conducción’ que el 7% de los accidentes mortales que se dan en las carreteras españoles están vinculados a los problemas de sueño. Esto implica que durante el ejercicio 2021, último con datos confirmados, hasta 77 personas perdieron la vida por este motivo. De media, 75 personas mueren y 250 resultan heridas graves al año en accidentes provocados por la somnolencia.
De los accidentes mortales derivados de estos problemas de sueño, el 42% se dan por salida de vía. De hecho, el accidente tipo provocado por la somnolencia es por salida de carretera, en gran medida en tramos rectos de autovía, en zonas con buena visibilidad y sin otros factores concurrentes. El horario más habitual es la madrugada y son accidentes que se producen sin dejar huella y en los que normalmente el conductor viaja sin pasajeros que puedan alertar al piloto.
Además, hay que tener en cuenta que en el 38% de los accidentes mortales que se dan por algún tipo de distracción, el factor fatiga y somnolencia también está muy presente. Así lo reconoce Tomas García Gazapo, jefe de operaciones de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil. Al respecto, señala que la sociedad «no tiene interiorizado que el sueño es un riesgo de siniestralidad vial, por lo que es algo que tenemos que cambiar. Conducir con falta de sueño multiplica por 5 las probabilidades de sufrir un siniestro«.
En este punto, los conductores profesionales de camión son uno de los colectivos que más sufren los efectos del sueño mientras están al volante. El 80% de los chóferes profesionales son autónomos y, por ende, no pueden dejar de trabajar, aunque sufran trastornos del sueño. Además, muchos de ellos llevan a cabo jornadas interminables y en condiciones precarias porque su sueldo va en relación con los kilómetros recorridos y las entregas realizadas.