El sector del transporte y la logística de Cataluña, integrando en gran medida en la patronal CECOT, ha mostrado su rechazo a la decisión del Gobierno de poner fin a la bonificación al combustible a finales de junio. Para los responsables de la patronal esta decisión del Ejecutivo es demasiado precipitada y considera que es mucho más prudente esperar a ver cómo evoluciona el precio de los combustibles en las próximas semanas, dentro de un contexto de gran impredecibilidad a nivel internacional.

Teniendo en cuenta la incertidumbre internacional y las variaciones que puede haber en el precio del crudo por esta situación, derivada en gran medida por la invasión rusa de Ucrania, el sector del transporte catalán pide a la ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, así como al resto del Ejecutivo, que valoren su posición de retirar la bonificación al combustible para el sector del transporte, valorada en 10 céntimos por litro desde el 1 de abril.

Aunque es cierto que el precio del Diésel ha mantenido en las últimas semanas una tendencia a la baja, no es menos verdadero que en la situación actual cualquier cambio que se produzca a nivel geopolítico o comercial puede cambiar esta dinámica y provocar un aumento del precio del combustible salvaje e inmediato. Una situación que para el sector del transporte catalán debe ser analizada para evitar tomar medidas precipitadas.

Como también han realizado organizaciones a nivel estatal, como puede ser la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España (FENADISMER), el sector catalán señala que la eliminación de la bonificación al combustible para el transporte de mercancías por carretera supone además un agravio comparativo respecto a otras actividades, ya que colectivos como el agrario mantienen una ayuda de carácter anual.