El Gobierno puso en marcha a principios de 2022 el programa de ayudas para la renovación de la flota de vehículos de transporte presente en las carreteras españoles. Una línea de ayudas bajo gestión de las Comunidades Autónomas que tenía varias aplicaciones y que contemplaba tanto el achatarramiento de camiones y autobuses viejos como la compra de vehículos nuevos, aunque estos debían ser cero emisiones, ya fuera porque cuentan con un tren motriz eléctrico o con una tecnología vinculada al hidrógeno.
Como se anticipó al lanzamiento de las ayudas, los transportistas se han decantado en su gran mayoría por achatarrar sus vehículos más antiguos para adquirir nuevos camiones, si bien se ha seguido apostando por la tecnología actual basada en el motor de combustión, ya que la oferta real de vehículos nuevos de propulsión eléctrica o con hidrógeno es muy reducida y realmente cara. De hecho, la mayoría de los beneficiarios de esta línea de ayudas por la compra de camiones cero emisiones son grandes empresas, especialmente de transporte de viajeros.
Un año después de que las Comunidades Autónomas pusieran en marcha la línea de ayudas del Gobierno central para la renovación de la flota de vehículos de transporte, programa con un presupuesto trianual de 400 millones de euros, la realidad es la esperada. La mayor parte de las solicitudes presentadas por los transportistas han sido destinadas al achatarramiento de vehículos viejos, ya que la compra de vehículos eléctricos o de hidrógeno es muy compleja por la escasa o nula oferta de este tipo de tecnologías.
De hecho, gran parte del presupuesto otorgado a las Comunidades Autónomas se ha agotado ante el gran número de ayudas de transportistas que buscaban achatarrar sus vehículos, ya que el único requisito es que estuvieran matriculados antes del 1 de enero de 2019. Por el contrario, la línea destinada a la compra de nuevos vehículos ha tenido una respuesta mucho menor, casi en su mayoría por parte de grandes empresas. La decisión de dejar fuera de las ayudas las compras de camiones Diésel de última generación o propulsados por GNL o GNC tiene mucho que ver.