El Servicio Catalán de Tráfico ha confirmado la puesta en marcha de un Plan de Intervención de mejora de la Seguridad Vial en la AP-7. Un paquete de medidas que estará vigente hasta 2025 y que, entre otras cosas, perpetúa las restricciones a camiones de más de 7,5 toneladas. Esta medida estará vigente todos los días del año, lo que supone una nueva afrenta para el sector del transporte de mercancías de la región, así como para los transportistas que utilizan la AP-7 en su camino a Francia.
En concreto, las restricciones a camiones en la AP-7 fijan la obligatoriedad a la circulación por el carril derecho a todos los vehículos pesados de más de 7,5 toneladas de MMA, sin opción de adelantar, durante todos los días del año. Además, estarán obligados a circular por este carril a una velocidad máxima de 80 km/h. Una cuestión que ha causado una gran indignación en el sector del transporte de mercancías por carretera, otra vez señalado por la Administración catalana.
La liberación de los peajes de la autopista AP-7 desde septiembre de 2021, tras más de 50 años de concesión privada, han cambiado la movilidad en Cataluña. El tráfico en esta autopista, ya sin peajes, se ha incrementado de manera notable, tanto por parte de usuarios particulares como de profesionales del transporte. En concreto, el tráfico ha crecido un 26% en el caso de los turismos y un 36% entre los vehículos pesados. Un aumento que no es homogéneo, ya que en ciertos tramos de la vía el tráfico es menor por la liberación de la autovía C-33.
Sea como fuere, el Gobierno catalán quiere ejecutar este Plan de Intervención sobre la AP-7 en el trienio entre 2023 y 2025 para mejorar la seguridad vial y reducir el número de accidentes que se producen en la carretera. Como si el transporte profesional fuera causa de los mismos, los responsables del Servicio de Tráfico catalán quieren perpetuar la obligatoriedad de circular por el carril derecho, en fila india sin adelantar, a 80 km/h. Hasta ahora, esta medida sólo se aplicaba domingos y festivos.