A mediados de marzo, el Gobierno de Portugal reconoció la emisión de tarjetas CAP destinadas a conductores profesionales que no cumplían con la normativa de la Unión Europea, toda vez que no portaban el número de homologación E21 que exige el reglamento europeo. Ante esta situación, el Ejecutivo luso elaboró una declaración oficial de responsabilidad para que todos los conductores afectados pudieran presentar este documento junto a la tarjeta CAP en caso de ser solicitada en una inspección de carretera.
La idea original de la Administración portuguesa era sustituir las tarjetas defectuosas a partir del mes de mayo por una nueva edición que sí cumpliera los requisitos fijados por la Unión Europea. Sin embargo, Portugal ha decidido cambiar de planes y finalmente no va a sustituir las tarjetas del CAP defectuosas por unas nuevas en estas fechas. Los chóferes afectados tendrán que portar así una declaración de autenticidad para evitar sanciones hasta que tengan que cambiar sus tarjetas por su fecha de caducidad.
En este sentido, el Instituto da Mobilidade e dos Transportes de Portugal ha comunicado que las tarjetas defectuosas no serán reemplazadas a corto plazo, ya que las nuevas tarjetas que se pretendían tramitar tienen el mismo problema. Por ese motivo, los conductores profesionales afectados deberán solicitar una declaración de autenticidad de la tarjeta a través de internet. Para ello, deberán facilitar el número de tarjeta de tacógrafo y del número tarjeta del conductor, tal y como se había articulado de manera provisional.
Las autoridades portuguesas esperan que con esta declaración se pueda evitar la incautación de las tarjetas defectuosas que se ha dado en algunos casos hasta ahora tanto en España como en otros países de la Unión Europea. En este sentido, los responsables portugueses están en conversaciones con todos los Estados miembro de la Unión Europea para apelar a la sensibilidad de sus autoridades. Se estima que el proceso de reemplazo podría empezar en agosto.