La convocatoria de huelga orquestada por Comisiones Obreras (CC.OO.) y UGT en el sector del transporte de mercancías por carretera de Alicante parece que ha surtido efecto. Ante la gran amenaza que suponía tener dos jornadas de huelga en los últimos días de enero y otras dos a principios de febrero, la patronal ha decidido cumplir con su palabra y proceder a la firma del nuevo convenio colectivo para que el documento entre en vigor de manera inmediata con su publicación en el Boletín Oficial de Alicante.
Pese a existir un acuerdo entre los representantes de los trabajadores del sector transporte alicantino y la patronal desde hace meses, los responsables de Fetrama estaban estirando el chicle, sin firmar el nuevo convenio colectivo para regular la actividad. Sin embargo, ante la posibilidad de una huelga entre los días 23 y 24 de enero -que no se ha ejecutado- y entre los días 6 y 7 de febrero, la patronal finalmente ha accedido a firmar un convenio diseñado para que los trabajadores puedan recuperar parte del poder adquisitivo perdido.
Aunque no se han llegado a cumplir todas las expectativas de los sindicatos, la firma de este nuevo convenio colectivo permitirá una subida salarial para los trabajadores del transporte de mercancías por carretera de Alicante del 11% durante los tres próximos años. Además, el texto dibuja la obligatoriedad de hacer dos pagos de atrasos de 250 y 1.000 euros, el primero en relación al ejercicio 2021 y el segundo por el ejercicio 2022. A cambio, CC.OO. y UGT han tenido que ceder reduciendo en un año la vigencia prevista del convenio.
Se espera que en los próximos días se proceda de una vez a la firma del articulado íntegro del convenio colectivo para su publicación en el Boletín Oficial de Alicante. Una circunstancia que desde CC.OO. y UGT señalan como el paso lógico para «dignificar las condiciones del personal del transporte de mercancías por carretera, ya que estos son clave para avanzar dentro de un sector estratégico y fundamental para la sociedad«.