La Organización Internacional del Transporte por Carretera (IRU) y la Federación Europea de Trabajadores del Transporte (ETF) consideran que la revisión del reglamento que define la Red Transeuropea de Transporte (RTE-T) es un paso vital para preservar el transporte dentro de la Unión Europea, sobre todo por carretera. En este sentido, piden que este proceso sirva para destinar más recursos al transporte de mercancías y viajeros por carretera, corrigiendo algunos de los problemas endémicos y de carácter histórico de la actividad.

Algunos de los problemas que afectan al transporte de mercancías por carretera son la falta de suficientes áreas de estacionamiento seguras y protegidas, así como la escasez de conductores por la falta de atractivo de una profesión con condiciones laborales cuestionables. También deben mejorarse los accesos a las terminales multimodales de mercancías y a los centros de pasajeros y garantizar la disponibilidad de infraestructura que permite apostar por los nuevos combustibles para cumplir con los objetivos de descarbonización del sector.

El Reglamento RTE-T está llamado a abordar estas cuestiones, pero un cambio real está sujeto a que los Estados miembro cumplan con los plazos y las soluciones que se dibujen en una normativa que debe ser más ambiciosa. El sector exige una red completa de áreas seguras de estacionamiento de camiones en la red principal de la RTE-T para 2035 y en su red integral para 2040. Debe darse un plazo intermedio en 2027. En la actualidad faltan 100.000 plazas de aparcamiento en la Unión Europea y hay una escasez de 400.000 conductores.

También se debe mejorar la accesibilidad de la red existente de terminales y nodos de la RTE-T para fomentar el transporte multimodal. Todas estas cuestiones que han sido propuestas por la Comisión Europea han quedado un tanto diluidas por parte de los Estados miembro, así como los plazos para la construcción de infraestructura de carga eléctrica y de repostaje de hidrógeno. Al final, más del 75% del total del transporte interior de mercancías en la Unión Europea se realiza por carretera.