La industria y el sector del transporte de mercancías por carretera viven un proceso de profunda y rápida transformación. La movilidad eléctrica se abre camino, aunque quizá no al ritmo esperado dentro del transporte pesado por las singularidades y necesidades que tiene la actividad, sobre todo en el transporte internacional de larga distancia. Sin embargo, la electromovilidad no es la única solución y así lo demuestra el último invento de la empresa estadounidense Remora. Los camiones Diésel pueden tener un futuro prometedor.
Las emisiones de los camiones Diésel han colocado este segmento de vehículos de punto de mira como principales causantes de las emisiones contaminantes del transporte. En busca de la neutralidad de la actividad, los camiones eléctricos, híbridos, con pila de combustible de hidrógeno y con gas se han convertido en alternativas verdes, sin que nadie se haya parado a pensar en el camino para que los propio camiones Diésel puedan ser menos perjudiciales para el medio ambiente. Al menos hasta ahora.
La empresa estadounidense Remora ha ideado un pequeño dispositivo que puede neutralizar gran parte de las emisiones de CO2 de los camiones Diésel en sus trayectos. Este dispositivo se acopla en los tubos de escape de los camiones Diésel y permite la normal circulación una vez instalado. Esta tecnología cuenta con un sistema de poros microscópicos que atrapa más del 80% del CO2 que un camión normal acabaría por emitir a la atmósfera. Sin embargo, el sistema deja pasar otros gases.
El CO2 queda atrapado en unos depósitos de almacenamiento de fácil descarga, ya que el sistema de Remora está ideado para que en 15 minutos el dispositivo quede vacío. Uno de los puntos fuertes de la tecnología es que no sólo reduce el CO2 emitido por los camiones Diésel, sino que permite vender este compuesto cargado de partículas de CO2 a la industria para su utilización en la creación de diversos objetos.
La mala noticia es que el sistema de Remora para los escapes de los camiones Diésel todavía no está todavía disponible, ya que la compañía todavía está realizando algunas comprobaciones y estudios para mejorar su funcionamiento. Bien es cierto que Remora ha comenzado a fabricar las primeras unidades que serán utilizadas en una fase beta con algunas flotas de camiones, aunque se espera que los resultados sean satisfactorios y este dispositivo no tarde en llegar al mercado.