Europa se encuentra sumida en una importante crisis de suministro, pero esta no se limita a la falta de microchips y componentes electrónicos. Los cuellos de botella en los puertos asiáticos y la gran dependencia del viejo continente de China dibujan una situación muy compleja que está provocando además graves problemas de producción en distintos sectores. Además de los obvios -industria automotriz-, otros sectores como la industria farmacéutica empiezan a vivir escasez de principios activos con los que elaborar sus productos.

La crisis de suministro está provocando una cierta escasez de algunos principios de productos activos de productos farmacéuticos, situación que si se prolonga en el tiempo puede derivar en situaciones puntuales de desabastecimiento de ciertos medicamentos en Europa en general y en España en particular. Las dificultades para obtener ciertas materias primas y el sobrecoste logístico, unido al aumento del precio de la energía, dejan muy poco margen de maniobra a un sector farmacéutico que ya ha elevado la voz ante esta situación.

La Federación Empresarial de la Industria Química Española (Feique) ha señalado que el sector está empezado a ver como la producción de principios activos farmacéuticos está sufriendo algunos problemas por la falta de materias primas. Una situación difícil, ya que al final se trata del primer eslabón dentro de la producción de medicamentos, por lo que a la postre puede derivar en desabastecimiento de ciertos medicamentos esenciales debido a que en la situación actual se da un sobrecoste en la fabricación que no puede repercutirse en un mercado de precios regulado.

La patronal del sector señala que «la situación de un posible desabastecimiento pueda estar controlada a corto plazo gracias a las inversiones de las empresas para tener aumentos de stocks para evitar así los incrementos de costes de transporte. Sin embargo, la merma en los beneficios año tras años, si la situación persiste, puede genera situaciones de desabastecimiento de ciertos principios activos y medicamentos esenciales en España y Europa, ya que el 65% de los insumos farmacéuticos, equipos e instalaciones provienen de China».