El sector del transporte de mercancías por carretera tiene serios y múltiples problemas, siendo uno de ellos la escasez de conductores de camión. Una situación que promete agravarse en los próximos años ante el escaso atractivo de la profesión, algo que se traduce en una importante ausencia de relevo generacional. Mientras tanto, la edad de los conductores profesionales no deja de crecer y la edad media del sector está en los 55 años. Eso significa que 4 de cada 6 conductores se jubilarán en la próxima década, agravando la citada situación.

A tenor de estos datos se puede decir que el trabajo de conductor profesional de camión se está convirtiendo en un empleo en peligro de extinción y sin un relevo generacional claro. Sin ir más lejos, en España, en la próxima década se jubilarán un 40% de los chóferes que trabajan en la Comunidad de Castilla y León, en torno a unos 12.000 profesionales. En esta Comunidad se necesitan ya más de un millar de conductores, cifra que crece hasta los 15.000 chóferes en el conjunto del país.

A pesar de existir ofertas de trabajo, las vacantes no se acaban de cubrir. Y la situación que se da en Castilla y León no es muy distinta a la que se registra en otras provincias y comunidades. En este aspecto, la Federación de Empresas de Transporte de Mercancías por Carretera (Fetracal) advierte que no hay un relevo generación ni entre los autónomos ni entre las pymes, dada la nula rentabilidad que tiene el trabajo de transportista. Una situación que, por idéntica razón, se extiende al sector de los conductores asalariados.

Volviendo a Castilla y León, la propia Junta reconoce que el precio medio sin IVA del kilómetro/carga se ha reducid casi un 1,2%, mientras que los costes han aumentado un 35%. Y es que, aunque las condiciones de los transportistas siempre han sido duras, en especial a la hora de conciliar su vida familiar, la situación ha empeorado drásticamente en los últimos años. Las esperas en los puntos de recogida y entrega de la mercancía, las tareas de carga y descarga, la tensión que se vive en las áreas de servicio por la inseguridad y los salarios son algunos puntos clave del deterioro de la profesión.