El sector del transporte de mercancías por carretera se ha movilizado en busca de soluciones. La actividad no soporta la tensión actual y la cadena de suministro se desquebraja sin que el Gobierno ponga en marcha medidas que puedan paliar los problemas de las empresas. Por eso, la patronal con el Comité Nacional a la cabeza ha convocado un paro del 20 al 22 de diciembre. Un movimiento apoyado por las grandes asociaciones de transportes, pero no por una parte del gremio de los transportistas.
De hecho, esta sección de chóferes profesionales acusa al Comité Nacional de proponer un paro patronal que no atenderá a los problemas reales de los pequeños transportistas, hasta el punto de tildar esta huelga de una pantomima para distraer la atención. Los conductores se están organizando ante un paro patronal que parece diseñado, según su entendimiento, para mirar por las grandes empresas y no por mejorar las condiciones laborales de los chóferes y, por extensión, hacer más atractiva la profesión.
Por este motivo, la junta directiva del sindicato Unión y Fuerza Transportistas ha emitido una misiva en la que se explica que se están dando los primeros pasos para organizar un paro nacional de todos los conductores profesionales. La convocatoria de UYF Transportistas quiere adelantarse al paro patronal y organizar su propia protesta para principios de diciembre. El objetivo de UYF Transportistas es unir a todos los conductores para luchar con mejores argumentos y pedir soluciones a los problemas que sufren.
El objetivo de los conductores profesionales de UYF Transportistas y de todos los chóferes que se puedan unir a este paro es acabar con la precariedad laboral que los transportistas viven en la actualidad y que sufren desde hace demasiado años. Con más de 2.000 afiliados, UYF espera reunir más apoyos para ejercer más fuerza y pelear por los derechos de los conductores ante la patronal y la Administración. No parece una tarea fácil, pero pase lo que pase es otra muestra de la desunión que existe en el sector.