El consejo de ministros ha aprobado el Real Decreto que regula la línea de ayudas impulsada por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana para la renovación de la flota de vehículos de transporte pesados dentro del objetivo de descarbonización del transporte profesional. Esta línea de ayudas, con un valor de 400 millones de euros, estará bajo gestión directa de las Comunidades Autónomas y tiene el objetivo final de achatarrar hasta 23.000 camiones pesados de transporte con alto valor contaminante.
Como es lógico, la línea de ayudas del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana contempla como objetivo principal la transformación del parque de vehículos pesados de transporte de mercancías y de viajeros, incentivando la penetración de nuevas tecnologías de propulsión alternativas. De esta forma, el Ejecutivo impulsa de manera directa la adquisición de vehículos de cero o bajas emisiones en un sector que todavía ha sido inmune a la transición ecológica. De hecho, en 2020 se matricularon sólo 6 camiones y 40 autobuses eléctricos.
La principal actuación subvencionable que recoge esta línea de ayudas del Ministerio son el achatarramiento de vehículos adscritos a una autorización de transporte y matriculados en España con anterioridad al 1 de enero de 2019. Con esto, el Gobierno espera achatarrar cerca de 23.000 camiones, lo que supondría una reducción estimada de las emisiones de CO2 de 600.000 toneladas al año. También contempla la adquisición de vehículos de energías alternativas o lo que es lo mismo, eléctricos, con pila de combustible de hidrógeno, híbridos, híbridos enchufables y de gas (GNL y GNC), aunque estos últimos hasta diciembre de 2023.
La línea de ayudas también contempla un apartado para la modificación de la propulsión de vehículos de combustibles de origen fósil (Diésel, gasolina o gas) a vehículos cero emisiones, eléctricos o de hidrógeno (BEV, FCV, FCHV). De igual forma, también es subvencionable de forma transitoria hasta finales de 2023 la transformación de motores Diésel o de gasolina para el uso de gas GNL y GNC. Además, también se contempla la adquisición de semirremolques para autopistas ferroviarias y para la implantación de infraestructura de recarga de vehículos eléctricos.