El Ejecutivo nacional dirigido por Pedro Sánchez y los representantes del Gobierno Foral de Navarra han sentado las bases del acuerdo para la transferencia de las competencias tráfico y seguridad vial a la administración regional. Este movimiento significa que, a falta de confirmar la fecha de ejecución y algunas de las condiciones del trasvase, la Comunidad Foral asumirá el control de las competencias de tráfico y entre otras cosas tendrá su propio calendario de aplicación de restricciones para camiones, como ya sucede en Cataluña y País Vasco.
Está previsto que el próximo 1 de diciembre se cierre la transferencia de las competencias de tráfico y seguridad vial entre el Gobierno y la Comunidad Foral de Navarra con la reunión de la comisión mixta de la Junta de Transferencias prevista para ese día. Este organismo tendrá que dar validez en último caso al proceso que sigue los pasos al trasvase de competencias en materia de tráfico que históricamente se ha realizado con otras Comunidades Autónomas como Cataluña o el País Vasco.
Hasta que llegue esta fecha, los encargados del trasvase de competencias siguen adelante con los trabajos técnicos para cerrar las últimas condiciones del traspaso. Para tal fin, el Gobierno de Navarra trasladará al Gobierno central la respuesta a la documentación técnica que ha sido remitida por parte del Ejecutivo central. Formalidades que darán paso a una nueva realidad dentro del transporte navarro, sobre todo en el caso del transporte profesional de mercancías por carretera que pueda trascurrir o producirse en la región.
¿Y en qué se traduce esta trasferencia de competencias? El Gobierno regional tendrá potestad de imponer sanciones administrativas, administrar las autoescuelas y centros de formación. También gestionará los cursos de reeducación y formación vial. Además, el Ejecutivo navarro aplicará las restricciones a la circulación por pruebas deportivas, marchas ciclistas y otros eventos, aunque quizá lo más importante es que tendrá su propio calendario de restricciones al tráfico de vehículos pesados. Por último, se creará una pasarela para que la Guardia Civil de Tráfico destinada en la región se reubique en la Policía Foral o en otros servicios de la Guardia Civil de Navarra.