El Juzgado de Instrucción número 1 de Donostia ha notificado la admisión a trámite e inicio de actuaciones en relación a la querella interpuesta en su día por Fedanismer, conjuntamente con el resto de asociaciones que componen el Comité Nacional de Transporte por Carretera, contra la diputada Foral de Infraestructuras de Gipuzkoa, Aintzane Oiarbide, y contra la empresa pública Bidegi que gestiona el cobro de los peajes a camiones en la N-I y la A-15 por «presunta desobediencia grave al no paralizar aún el cobro del actual peaje, pese a haber sido declarado nulo por el Tribunal Supremo«.
La Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España ha dado a conocer, a través de un comunicado en su página web, esta decisión judicial que responde a la querella criminal presentada el pasado mes de junio por los transportistas. Asimismo, Fenadismer ha recordado que la Diputación de Gipuzkoa inició a finales del pasado mes de julio la tramitación de una nueva Norma foral para intentar establecer por tercera vez un sistema de peajes a camiones sobre todo el trazado de la N-1 y la A-15, en sustitución de las dos anteriores Normas forales declaradas nulas por el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) y posteriormente ratificado por el Tribunal Supremo, aunque su puesta en marcha, de aprobarse finalmente, no se produciría antes del segundo semestre del próximo año, previsiblemente.
En esa línea, ha apuntado que la propuesta de la institución foral guipuzcoana pasa por «someter a peaje prácticamente todo el trazado de ambas vías, a fin de tratar de no incurrir en los mismos ‘errores jurídicos’ que afectaron a las regulaciones anteriores«, para lo que plantea establecer «hasta 32 puntos de control para el cobro del peaje, frente a los cuatro existentes con anterioridad«.
Sin embargo, «a fin de asumir la mayor inversión que tal mastodóntica infraestructura supondría«, la Diputación propone «incrementar sustancialmente» el importe de los peajes, llegando a «triplicar» el precio exigido actualmente, lo que Fenadismer considera una «venganza» hacia los transportistas por «haber conseguido tumbar judicialmente por dos veces dicha medida recaudatoria«. La Federación ha incidido en que, tanto la N-I como la A-15, que se pretenden someter al nuevo canon, «no se tratan de vías asimilables al de autopistas de alta capacidad en cuanto a su diseño y trazado» y, sin embargo, el importe propuesto «supera con creces el de la media de las autopistas de peaje de alta capacidad del resto del territorio nacional«.
Así, tal y como ha detallado, la cuantía del peaje propuesta para los camiones de mayor tonelaje «asciende a los 0,28 euros por kilómetro recorrido, frente a una media de 0,19 euros en las autopistas de peaje españolas ( en el caso de la autopista AP-68 que conecta Bilbao con Zaragoza el coste por kilómetro en la actualidad para un camión se sitúa en 0,16 euros por kilómetro)». «Ello que implicará que cada camión deberá soportar un peaje por trayecto recorrido de hasta 14,80 euros, frente a los 5,94 euros que soportaba en la actualidad«, ha alertado.