El anuncio de Grant Shapps, secretario de Estado para el Transporte de Reino Unido, sobre la decisión del Ejecutivo británico de flexibilizar la normativa de los tiempos de conducción y descanso no ha tardado en ejecutarse. De hecho, UETR ha informado que el Gobierno iniciará la flexibilización de la normativa del tacógrafo hoy mismo, 12 de julio. Una medida que por el momento se extenderá hasta el 8 de agosto, aunque no se descarta que se pueda ampliar el plazo si la delicada situación que vive el sector del transporte de mercancías por carretera en Reino Unido.

La falta de conductores por los efectos del ‘Brexit’ y de la pandemia de COVID-19 han llevado al Gobierno de Reino Unido a flexibilizar la regulación de los tiempos de conducción y descanso. Una medida que pretende acabar con cualquier posible falta de suministro y abastecimiento de productos de alimentación y de primera necesidad, riesgo existente ante la gran demanda de servicios de transporte y la escasez de chóferes profesionales que puedan ejecutarlos. Por el momento, la exención a la norma se aplicará del 12 de julio al 8 de agosto, aunque no se descarta una prórroga de la misma.

La exención a la normal aplicación de la normativa de tiempos de conducción y descanso que arranca hoy 12 de julio es válida para todos los transportistas británicos, pero también para los chóferes de la Unión Europea que transiten por Gran Bretaña. Se podrán aprovechar así unos y otros de la decisión del Gobierno de aumentar el límite de conducción diario de 9 a 10 horas, siendo posible conducir hasta 11 horas dos veces por semana. Además, el Gobierno también ha elevado el límite de conducción quincenal de las 90 a las 99 horas.

En lo que respecta al descanso de los conductores, el periodo de descanso semanal regular en un periodo de dos semanas puede ser reemplazado por dos periodos de descanso semanal reducidos de al menos 24 horas. Sin embargo, si un conductor se acoge a esta opción, deberá tomar posteriormente dos periodos de descanso semanales regulares completos. Además, cualquier reducción del descanso semanal se compensará con un periodo de descanso equivalente antes del final de la tercera semana siguiente, siempre junto a un periodo de descanso semanal regular de al menos 45 horas.