El Pacto Verde de la IRU define las claves para descarbonizar el transporte en 2050

La Organización Internacional del Transporte por Carretera (IRU) ha lanzado su propuesta de Pacto Verde para lograr la neutralidad de emisiones de carbono en los servicios de transporte de mercancías por carretera en 2050. Este documento dibuja una hoja de ruta clara para la descarbonización del transporte, toda vez que el sector engloba a más de 65 millones de vehículos pesados y representa el 2,5% de las emisiones globales de CO2. En este aspecto, el objetivo es reducir las emisiones en al menos 3.000 millones de toneladas anuales sin comprometer la actividad.

Los pilares sobre los que se sustenta el Plan Verde de la IRU son cinco. El primero pasa por el uso de combustibles de bajas o nulas emisiones de carbono, algo que va ligado al uso de tecnologías de vehículos más eficientes y ciclos de renovación de flotas más cortos. El texto también promueve una logística más eficiente con un uso más amplio de camiones ecológicos, así como del transporte colectivo de pasajeros. Por último, y en clave de futuro, se debe fomentar una educación y formación que permite mejorar el comportamiento colectivo y de conducción.

Para cumplir con el Pacto Verde, la IRU ha dibujado una ruta con tres plazos fijos en los que cumplir los distintos objetivos. Así, para 2030 se deben haber reemplazado al menos 300.000 litros de Diésel por combustible de bajas o nulas emisiones en carbono, reemplazar seis millones de camiones estándar por opciones más ecológicas y reducir a su vez la antigüedad media de la flota a 9 años. Además, el 50% de todos los países deberán contar con una legislación que dibuje una formación obligatoria para conductores más eficientes.

En esta línea, el texto de la IRU señala que en 2040 se debe haber sustituido al menos 450.000 millones de litros de Diesel por carburantes libres de emisiones, además de ser necesario el reemplazo de 14 millones de camiones estándar por camiones más ecológicos, así como reducir la antigüedad de la flota de camiones en uso a siete años de media. El 70% de todos los países deberá tener por entonces una legislación que tenga en cuenta una formación obligatoria de conductores más ecológicos.

Por último, los objetivos del IRU para 2050 fijan la sustitución de al menos 600.000 millones de litros de Diésel por combustibles de bajo contenido de carbono o nulas emisiones. Además, es necesario reemplazar al menos 24 millones de camiones estándar por camiones ecológicos, algo más cercano ante la evolución tecnológica que vivirá la industria en un cuarto de siglo. Los gobiernos además deberán promover programas para reducir la antigüedad media de la flota de camiones a 5 años y que todos los países tengan una legislación para forma conductores más eficientes.

Fernando Sancho

Redactor especializado en movilidad, transporte de mercancías por carretera y las actividades anexas al sector.

Deja una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.