La Guardia Civil ha desarticulado dos organizaciones delictivas que se dedicaban al robo de camiones y naves industriales en Guadalajara y otras provincias como Madrid, Toledo, Ciudad Real, Salamanca, Burgos y Córdoba. En el marco de la Operación ‘Tractonault’, los agentes han detenido a 31 personas de nacionalidad española por la presunta realización de 36 robos, además de por presuntos delitos contra el patrimonio y de pertenencia a organización criminal. Además, otras 21 personas están siendo todavía investigadas.
La operación ‘Tractonault’ comenzó hace un año tras el robo de un camión lleno de aceite en Santa Cruz de Mudela (Ciudad Real). A partir de este acto delictivo, los agentes detectaron que detrás había una organización criminal en forma de banda jerarquizada. De hecho, el jefe de la organización planificada las salidas, el segundo escalón de la banda fijaba los objetivos de sus actos delictivos, ya fueran camiones o naves industriales. Por su parte, el resto de la banda se dividía entre personal de soporte -desactivar alarmas, localización GPS-, los propios asaltantes y los encargados de comercializar la mercancía robada.
Parte de la mercancía robada por esta banda criminal se vendía a comerciantes de origen chino, para que estos pudieran darle salida en sus tiendas. Sin embargo, la participación de un conductor con todos los permisos de conducir, encargado de mover los camiones robados, ha permitido a la Guardia Civil ampliar su investigación por su conexión con una segunda banda organizada. Una segunda organización que también perpetraba robos en camiones y naves industriales, además de sustraer vehículos de alta gama para llevar a cabo sus acciones delictivas.
Si bien cada organización tenía sus protocolos de actuación, ambas bandas empleaban de forma regular inhibidores de frecuencia para anular los sistemas de alarma y detectores GPS a la hora de inutilizar los camiones que iban a sustraer. Una vez que se hacían con los vehículos, los productos se trasladaban a naves de polígonos de Madrid o Toledo para la manipulación de los camiones, a los que se cambiaba la matrícula para poder moverlos sin problemas a naves de ocultación donde descargaban la mercancía.