El transporte portuario está sufriendo una grave escasez de contenedores vacíos, circunstancia que ha acabado por afectar también al transporte de mercancías por carretera. De hecho, sólo era cuestión de tiempo que esta escasez de contenedores provocada alteraciones en el flujo de toda la cadena de suministro. En este aspecto, Fenatport estima que el problema en torno a los contenedores vacíos se extenderá a otros segmentos de la cadena logística, ya que la falta de equipo vacío en distintos recintos portuarios es realmente preocupante.

La organización empresarial Fenatport denuncia la mala gestión que se está realizando de los contenedores vacíos, entre otras cosas por la falta de previsión y de una estrategia con sentido a la hora de devolver estos contenedores vacíos a los transportistas. Por este motivo, Fenatport señala que es de vital importancia implantar un sistema de categorización de los contenedores en función del timo de carga para la que han sido destinados. Sistema que además debe permitir conocer de manera anticipada los cambios de equipo por mal estado.

Más allá de este punto, la alarmante falta de stock en las instalaciones portuarias de todo el país provoca que la gestión de los contenedores vacíos sea todavía más problemática, lo que al final acaba por afectar al transporte de mercancías por carretera portuario. Una situación que se debe en gran medida a la deficiente comunicación de las navieras sobre el stock de contenedores vacías. Y es que la falta de información en tiempo real obliga a los transportistas a realicen desplazamientos infructuosos con sus camiones hasta instalaciones portuarias que al final no disponen de equipos vacíos.

Al final se trata de un problema de optimización de la cadena de suministro que termina por ser especialmente perjudicial para los transportistas que se mueven hasta los puertos de todo el país y tienen que asumir tiempos de espera hasta que se solucionan esta falta de stock. Una situación que está generando tensiones de carácter operativo, pero que también está empezando a causar estragos a nivel comercial por la falta de contenedores para cubrir la demanda de transporte, lo que hace que la solución todavía sea más necesaria.