La Federaçao dos Sindicatos de Transportes e Comunicaçoes de Portugal (FECTRANS) ha liderado la cruzada del sector para conseguir la ansiada normativa que regule de una vez por todas las labores de carga y descarga en el transporte. En esta línea, FECTRANS dirigió el pasado 2 de enero una solicitud de reunión al Minsitro de Infraestructura para analizar la situación del sector del transporte de mercancías por carretera y definir la aplicación del Acuerdo de regulación de la carga y descarga. Sin embargo, FECTRANS no recibió respuesta.
Cabe recordar que el ministro de Infraestructuras de Portugal se comprometió a atender uno de los problemas más graves del sector transporte del país vecino, asegurando además que, si no existía un acuerdo por autorregulación, se pondría en marcha una iniciativa legislativa para regular la carga y descarga. De hecho, la Comisión de Seguimiento a través de un informe ha sido la primera en defender la necesidad de pasar a la acción y legislar el acuerdo de carga y descargas.
Sin embargo, la realidad es que la falta de regulación está generando una situación de difícil control en el sector porque muchas empresas siguen exigiendo que el conductor haga las tareas de carga y descarga. Empresas y asociaciones de cargadores hacen como si no hubiera ningún acuerdo en esta materia, exigiendo en algunos casos que los conductores firmen una declaración y operen con equipos de carga y descarga. Una circunstancia que viola el Contrato Colectivo de Trabajo Vertical (CCTV) y el Acuerdo Marco.
Incluso algunos empresarios dueños de compañías de transporte también tienen una parte de culpa en esta situación, ya que defender la necesidad de que sus chóferes no realicen nunca las tareas de carga y descarga contrasta con la permisividad ante los clientes, siempre situados por encima de os conductores. Mientras tanto, el Ministro de Infraestructuras parece hacer oídos sordos a la queja del sector y la solución no parece que esté cercana a llegar.