La aparición de una nueva cepa de COVID-19 en Reino Unido y el cierre temporal de fronteras con el país ha generado una situación caótica para el sector del transporte de mercancías por carretera. Miles de camiones han quedado atrapados en el puerto de Dover y en los accesos al Eurotunnel, provocando además que las habituales rutas de transporte se hayan modificado en las últimas jornadas. Ante esta situación, Bélgica ha decidido flexibilizar la normativa de tiempos de conducción y descanso para facilitar los tránsitos de transportistas en próximas fechas.
Con el fin de facilitar los servicios de transporte hacia Reino Unido que se puedan llevar a cabo en los próximos días tras la apertura de las fronteras como compensación de las jornadas de paralización, Bélgica ha aprobado una flexibilización de la normativa de conducción y descanso para facilitar el tránsito de camiones en su territorio. La norma estará vigente entre el 28 de diciembre de 2020 y el 21 de enero de 2021, medida pionera y que puede ser ejemplo para otros países.
La regulación excepcional aprobada por el Gobierno de Bélgica para facilitar el tránsito de camiones hacia los puertos de Bélgica y Francia de camino hacia Reino Unido permite ampliar el tiempo de conducción máxima diaria de nueva a once horas. A su vez, también permite de forma excepcional que las pausas obligatorias de 45 minutos se puedan llevar a cabo después de cinco horas y media de conducción, dibujando así dos bloques de conducción simétricos ante el aumento de las horas de tránsito máximo.
Por otra parte, la normativa temporal belga también hace cambios en la realización de los tiempos de descanso diario. De hecho, el texto abre la posibilidad de reducir el descanso diario de once a nueve horas, movimiento ligado al cambio en los tiempos de conducción. A su vez, el Gobierno belga también permite dentro de los tiempos de conducción y descanso semanal aplazar el descanso semanal más allá de los seis días máximos de conducción si eso sirve para alcanzar uno de los puertos y/o pasos fronterizos que comunican con Reino Unido.