El problema de la carga y descarga en el sector del transporte de mercancías por carretera es un mal histórico que con la crisis sanitaria asociada a la pandemia de COVID-19 se ha agravado de forma notable. Por este motivo, la Organización Internacional del Transporte (IRU) ha unido fuerzas con el Consejo Europeo de Cargadores (ESC) y la Federación Europa de Trabajadores de Transporte (ETF) para emitir una declaración conjunta en la que pide que los conductores tengan un mejor trato en los puntos donde se realizan las labores de carga y descarga.
La carta emitida por la IRU tiene como objetivo poner de relieve la situación que se produce en torno a las labores de carga y descarga, así como el trato que reciben los chóferes en algunos de los puntos donde se producen estas tareas. De hecho, la IRU exige que los chóferes sean tratados con más respecto y disfruten de condiciones de trabajo dignas en los lugares en los que se produce la entrega de mercancías. Esto incluye acceso a instalaciones sanitarias, salas de descanso, áreas de estacionamiento seguras y, lo que es más importante, no realizar dichas tareas de carga y descarga.
IRU está recogiendo firmas para apoyar esta iniciativa y que los conductores reciban un trato digno durante la carga y descarga. Sin embargo, el ambiente está caldeado y los problemas cada vez más serios del sector transporte están muy cerca de dinamitar la actividad. De hecho, Unión y Fuerza Transportistas ha hecho una llamada a un paro general para luchar contra estos problemas que afectan a la actividad y que hacen del sector cada vez menos atractivo para los nuevos conductores que quieren acceder a la profesión.
La modernización del sistema, el control de la libre competencia mal entendida, la necesidad de crear un convenio único a nivel nacional que fije el pago de las horas extra, las dietas, el plus de nocturnidad, los descansos semanales y también un precio mínimo por kilómetro y tonelada de carga. Desde esta asociación sindical que pretende aunar bajo el mismo paraguas a conductores autónomos y que trabajan por cuenta ajena también pide acabar con los falsos autónomos para ejercer así un mejor control sobre la facturación y evitar fraudes.