La pandemia de COVID-19 ha generado una situación de enorme incertidumbre en el sector del transporte de mercancías por carretera. Una incertidumbre que el Gobierno no ha sabido disipar con medidas erráticas, cambios de estrategia y soluciones que en muchas ocasiones han excluido a los principales afectados por la crisis económica y sanitaria. Para muestra, la actuación en torno a los aplazamientos de impuestos para autónomos y pymes con el fin de dotar al sector de liquidez y hacer frente a estos meses tan difíciles para el transporte.
No obstante, el Gobierno aprobó en marzo la posibilidad de que autónomos y pymes del sector se pudieran acoger al aplazamiento de impuesto diseñado por el Ejecutivo sin que esta medida afectase a su negocio. Sin embargo, sin previo aviso, los autónomos que solicitaron dichos aplazamientos se han encontrado con que la Agencia Tributaria los está descontado de sus declaraciones anuales del IRPF cuando sale a devolver, corrompiendo el espíritu de la norma. Un atropello muy grave en una situación económica tan delicada como la actual.
La flexibilización y/o aplazamiento de los impuestos hasta un máximo de 30.000 euros durante seis meses fue una de las medidas más destacadas del Gobierno para luchar contra los efectos económicos de la pandemia. A esta medida se podían acoger los autónomos y pymes con una cifra de negocio inferior a los 600.000 euros, buscando así paliar la falta de liquidez por la disminución parcial o total de su actividad durante los meses en los que se ha decretado el Estado de Alarma por culpa de la pandemia.
Sin embargo, los autónomos que se han acogido a este aplazamiento no han obtenido liquidez alguna a medio plazo, toda vez que han visto como la Agencia Tributaria está descontando el importe aplazado de sus declaraciones anuales de IRPF presentadas en junio en los casos en los que la Declaración de la Renta les sale a devolver. Desde FENADISMER denuncian que esta actuación es inadmisible y que atenta contra el espíritu de esta medida, así como contra los propios autónomos y pymes del sector, con un procedimiento oculto pensado para compensar sin informar a los afectados los aplazamientos tributarios.