La pandemia de COVID-19 sigue alterando la actividad del sector del transporte de mercancías por carretera y así ha quedado patente en los datos del mes de mayo en relación al precio y capacidad del transporte europeo. Según refleja el último informe de ‘Transport Market Monitor’, los precios en el sector siguen a la baja, incluso cuando en el mes de mayo la disponibilidad de vehículos se ha reducido en un 2,7%. Por ahora, el aumento de la demanda no ha mejorado las condiciones de los servicios.
Este descenso en la disponibilidad de vehículos de transporte en mayo frente al mes anterior refleja, de alguna forma, una cierta reactivación del sector. Sin embargo, el incremento de la demanda no se corresponde aún con una evolución lógica del mercado. De hecho, los precios en mayo continúan con su proceso paulatino de caída, en línea con los datos registrados en abril. De hecho, el descenso de los precios se fija en un 3,9% respecto al mes anterior y en un 15,2% en relación a mayo de 2019.
Sin una correspondencia real entre el ligero aumento de la demanda y el precio medio de los servicios, los profesionales autónomos y compañías del sector transporte aún pueden respirar ligeramente gracias al precio del combustible. No obstante, el Diésel también mantiene una tendencia a la baja en su precio. De hecho, el Diésel está un 3,5% más barato que en abril y un 20,3% respecto al importe que se paga hace un año. Un pequeño alivio en tiempos difíciles en los que prima la falta de liquidez.
Pese a que en el mes de mayo ha disminuido el número de vehículos pesados detenidos o sin actividad, la realidad del sector transporte señala que la relación directa entre la capacidad del transporte en Europa y los precios de los servicios están llevando al límite a una gran cantidad de profesionales autónomos y compañías de transporte. No obstante, tanto el volumen de vehículos ocupados como el precio de los servicios están muy lejos de los que se darían en una situación de normalidad.