LA UNIÓ de Llauradors denuncia que Sudáfrica y Mercosur emplean en sus cítricos pesticidas cuyo uso está prohibido en la Unión Europea tras realizar análisis a estos productos, confirmando así las sospechas que desde el pasado mes de abril se tenían.
Las sospechas denunciadas el pasado mes de abril por sobre el uso de materias activas de pesticidas en los cítricos de Sudáfrica y Mercosur que están prohibidas en la Unión Europea quedan totalmente confirmadas tras las analíticas posteriores efectuadas y cuyos resultados se acaban de conocer.
Esta organización ha procedido a la compra de cítricos procedentes de Sudáfrica y Mercosur y los ha llevado a un laboratorio de la Comunitat Valenciana autorizado tanto por la Conselleria de Sanitat Pública como la de Agricultura para analizarlos. Las pruebas analíticas son contundentes y entre otras sustancias se encuentra la carbendazima (prohibido su uso en la UE desde junio de 2016). También destacan estas pruebas que los cítricos de Sudáfrica analizados poseen hasta siete materias activas de pesticidas, lo que pone de manifiesto que son menos sostenibles desde el punto de vista medioambiental que los nuestros.
Tras esta confirmación, LA UNIÓ se va a poner en contacto con las cadenas de distribución-supermercados para que rechacen aquellos cítricos de sus proveedores que contengan materias activas de pesticidas que no se pueden emplear en el ámbito de la Unión Europea. Así, los supermercados darían muestra de sensibilidad hacia los agricultores, pero sobre todo ante los consumidores.
Carles Peris señala que “una vez demostradas fehacientemente nuestras sospechas y ante esta situación de competencia desleal y discriminación de nuestros productores a pesar de ser europeos, exigimos una reciprocidad y por tanto la prohibición de importación de cítricos de países terceros que tengan autorizado la utilización de materias activas cuyo uso está prohibido en la Unión Europea y, especialmente, aquellas catalogadas por la OMS como extremada o altamente peligrosas”.
LA UNIÓ ya dejaba claro en el estudio de hace seis meses que no se habían realizado por el momento analíticas a las producciones importadas. Pero ahora ya se han realizado las pruebas en el laboratorio y se confirma lo anunciado en su día: los cítricos de países terceros llevan pesticidas cuyo uso se encuentra prohibido en la Unión Europea, lo que supone un claro fraude para productores y consumidores.