Faltan 15.000 camioneros y no hay relevo generacional. La media de edad de los camioneros es de unos 55 años: el sector calcula que un 70% de los conductores actuales se jubilarán en la próxima década en España.
Conducir un camión es un trabajo en peligro de extinción. Las patronales del transporte alertan de que la falta de conductores de camiones, especialmente de alto tonelaje, impide que el sector asuma eficientemente el aumento de actividad en el sector. En necesitan unos 15.000 en todo el estado y no hay candidatos a pesar de las ofertas de trabajo.
Las empresas de transporte de mercancías por carretera deben enfrentarse a un doble problema: la media de edad de los chóferes es alta y la profesión no seduce a los jóvenes. La profesión, con salarios ajustados y largas jornadas de trabajo , ha dejado de ser atractiva. El reto del transporte para la próxima década será encontrar el recambio al elevado número de chóferes que se jubilarán.
«Este trabajo es duro, no sabes qué te puedes encontrar ni puedes planificar mucho.»
Al volante de un camión desde hace décadas, Joan Codinach añade: «Cada vez hay más gente mayor, y de gente joven en sube poca«.
La realidad, según las patronales del sector, es que la edad media de los trabajadores aumenta un año cada año. Ser chófer de camión fue una vía de reciclaje para trabajadores durante la crisis , pero ahora ya no es atractivo. Salarios ajustados, largas jornadas de trabajo y el coste de sacarse los carnés y los certificados restan atractivo para que haya un relevo generacional. Y los transportistas lo saben.
«Los salarios han desmotivado este puesto de trabajo. Para repartir en Cataluña se pagan unos 1.400 euros y el transporte nacional e internacional supone un sueldo de unos 2.000 euros«, asegura el asesor de Transportes del Gremio de Transportes y Logística de Cataluña, Joaquín Gil.
«Un conductor de una carretilla elevadora en un almacén trabaja ocho horas y duerme en casa todos los días. Cobra lo mismo que un camionero, que no sabe cuántos días será fuera de casa.»
Una situación que percibe cada vez más Evaristo Magaña, presidente de la Asociación de Transportistas Agrupados Condal.
Camionero joven y con experiencia es una utopía en el sector. Lo comprobaron empresarios del gremio catalán creando un perfil en un portal de trabajo: chófer de 40 años con una veintena de experiencia. Le llovieron las ofertas en pocas horas. Algunas empresas le ofrecían un contrato inmediato y mejor pagado que la media del sector.
La realidad en las empresas, sin embargo, es otra. Según el gerente de Fredist, Joan Casanovas, se podría absorber más trabajo a su nave de las Masies de Voltregà, que da trabajo ya a un centenar de camioneros, pero no quieren tomar más proyectos porque no ven viable encontrar, de golpe, 5 o 10 chóferes. Asegura, además, que el comercio en Internet ha aumentado el transporte, pero los vendedores les ajustan mucho el precio e «incrementar los salarios es complicado sin mucho margen para los beneficios«.
Desde el gremio advierten que esta situación es la consecuencia de cobrar precios del transporte de hace una o dos décadas, cuando por ejemplo repostar gasóleo era la mitad de económico que lo es ahora. «Esto ha empobrecido el sector», lamenta Joaquín Gil.
Autónomo, mayor de 45 años, sin estudios y al mismo tiempo camionero. La crisis puso este perfil al volante de muchos camiones para el transporte era una fuente de ingresos rápida. Para los empresarios, era un servicio más económico que tener asalariados. Así, la empresa Fredist podía aumentar el servicio, pero los nuevos reglamentos bloquearán el acceso a la profesión.
A partir del 1 de julio del año que viene, a los autónomos se les exigirá FP o Bachillerato .
«En un 80% de los casos, este perfil sin estudios, iniciaba esta actividad empresarial porque veía un buen futuro laboral y una buena manera de ganarse la vida. La nueva normativa provocará que toda esta gente quede excluida del sector«.
Pedro Cuberas circula desde hace años por la carretera y reconoce que le atrae el dinamismo de la profesión: «cada día es diferente a pesar de ir al mismo sitio«. A pesar de esta pasión, cree que actualmente hay muchos obstáculos: «Para empezar se necesitan unos 3.000 euros para sacarse el carnet y los certificados de aptitud«.
Animar a los jóvenes que quieren subir a un camión si pueden ser asalariados, porque «como autónomos lo pensaría un poco más«. Los costes salariales para las empresas son elevados ya que es una profesión de riesgo. Esto provoca, según Magaña, que las empresas externalicen el trabajo y se instalen en países de la Europa del este o Portugal, donde este gasto a la seguridad social puede llegar a ser un 50% más baja que en España .
El sector vive una situación complicada y busca cualquier solución. Los transportistas aseguran que encontrar chóferes se ha convertido en una aventura.
Una de las soluciones que han encontrado las empresas es llamar a las autoescuelas para pedirles que les avisen cuando alguien se examine del permiso de camionero. Y el teléfono suena poco. Ni chóferes ni nuevos grandes camiones. La prueba es que en circulan muy pocos con una matrícula que empiece por la letra K. La letra de los últimos vehículos que han salido de los concesionarios.
Via: https://www.ccma.cat/324/el-sector-del-transport-alerta-falten-15-000-camioners-i-no-hi-ha-relleu-generacional/noticia/2927500/