Estos dos nuevos tramos de la A-23 se encuentran entre Alto de Monrepós y Lanave. Además, se abre al tráfico, temporalmente en modo bidireccional, un tercer tramo de nueva calzada entre Congosto de Isuela y Arguis.
Suponen una mejora sustancial en la seguridad y capacidad de la vía con un ahorro de 3,5 km de recorrido en el sentido hacia Jaca y de 1,5 km en el sentido hacia Huesca.
La N-330 se corta al tráfico entre Congosto de Isuela y el enlace de Arguis, previsiblemente hasta finales de verano, y se producirán afecciones al tráfico entre Caldearenas y Lanave hasta mediados de abril.
El Ministerio de Fomento pone en servicio mañana, jueves 21 de marzo, dos tramos de la autovía A-23 en la provincia de Huesca, entre Alto de Monrepós y Lanave, y abre al tráfico, temporalmente en modo bidireccional, un tercer tramo de nueva calzada entre Congosto de Isuela y Arguis.
La autovía A-23, junto con las autovías A-21 Pamplona – Jaca y A-22 Huesca -Lleida, constituirá una alternativa al valle del Ebro para comunicar la cornisa Cantábrica con Cataluña.
Se trata de unas obras enmarcadas en un entorno montañoso de gran complejidad geológica y geotécnica, en el denominado puerto de Monrepós. A estas dificultades se ha añadido la imprescindible compatibilidad de los trabajos con el mantenimiento del todo el tráfico existente en la actual carretera N-330, sobre la que se apoya en su mayor parte la calzada sentido Huesca de la autovía si bien en algunos tramos se han realizado acondicionamientos en su trazado.
Los tramos que se ponen en servicio son:
Congosto de Isuela-Arguis: 2,3 km de nuevo trazado que conforman la calzada sentido Jaca de la autovía, temporalmente en modo bidireccional, hasta completar los trabajos en la otra calzada (actual N-330) que queda cortada al tráfico. A partir del enlace de Arguis (1 km), la autovía está en servicio desde julio de 2018, a falta de capa de rodadura.
Alto de Monrepós-Caldearenas: 4,1 km de nuevo trazado que conforman la calzada sentido Jaca de la autovía.Caldearenas-Lanave: 2,2 km de nuevo trazado que conforman la calzada sentido Jaca de la autovía (dando continuidad al tramo anterior), y se suman a los 4,5 km finales de este tramo puestos en servicio en julio de 2018. 8,5 km de la calzada sentido Huesca, que se apoya en la actual carretera N-330, en la que se producirán afecciones al tráfico a partir del 25 de marzo para completar los trabajos pendientes.
El presupuesto global de las tres actuaciones que se pondrán mañana en servicio asciende a 208,3 millones de euros, con una inversión total de 238,5 millones de euros una vez sumado el importe de las expropiaciones y las asistencias técnicas de redacción de los proyectos y de control y vigilancia.