El sector del transporte de mercancías por carretera ha vuelto a ser uno de los damnificados por las protestas de los agricultores. Primero fue Francia, ahora España. Aunque el desarrollo de las manifestaciones y tractoradas está siendo muy distinto, lo cierto es que una vez más los transportistas vuelven a pagar los platos rotos. Según refleja FENADISMER, durante la jornada de protestas del miércoles 7 de febrero unos 80.000 camiones se vieron afectados por los bloqueos de los agricultores de nuestro país.

El bloqueo de la práctica totalidad de las autovías radiales de Madrid, de las autovías y vías de alta capacidad del corredor Mediterráneo y de las dos Castillas, más las que se están dando en Andalucía, han provocado que el transporte de mercancías por carretera no haya podido llevar a cabo su labor con normalidad. Unos 80.000 camiones se han visto afectados por los distintos actos de protesta, sin importar la llamada da la responsabilidad del sector para poder llevar a cabo su labor que, además, está ligada íntimamente a las propias explotaciones agrarias.

Durante la jornada del miércoles la práctica totalidad de autovías que parten de Madrid, así como las autopistas y autovías que vertebran Cataluña, la Comunidad Valenciana, Murcia, Andalucía, Extremadura, Castilla y León y Castilla-La Mancha han sufrido bloqueos o marchas lentas que han afectado a los transportistas. En los casos más graves, según los datos sobre Intensidad Media de Circulación publicados por el Ministerio de Transportes, los camiones han estado retenidos durante más de 12 horas.

En este sentido, FENADISMER hace un llamamiento a la responsabilidad de los convocantes de las manifestaciones en el ejercicio de sus protestas para que no afecten al normal desarrollo de la actividad del transporte por carretera, ya que la alteración del normal desarrollo del sector del transporte afecta asimismo a las propias producciones del sector agrario, como quedó constatado en Francia, donde los bloqueos y ataques supusieron la pérdida de miles de toneladas de productos hortofrutícolas que no pudieron llegar a su destino.