El Sindicato de Servicios Públicos y Comerciales de Reino Unido (PCS) ha notificado de manera formal que en torno a 100.000 funcionarios están llamados a participar en la jornada de huelga prevista para el 28 de abril. Entre los funcionarios llamados a este paro se encuentran los representantes del organismo en el Ministerio del Interior, el personal de oficina, el personal incrustado en el Comando Marítimo de la Fuerza Fronteriza y de respuesta operativa ante llegadas ilegales y, como no puede ser de otro modo, los funcionarios fronterizos.
De esta forma, la huelga afectará de manera irremediable a las llegadas internacionales que se den en todos los puertos de Reino Unido. También será un contratiempo para los servicios de transporte de mercancías por carretera que utilizan el Eurotunnel o los diversos ferris que sirven para conectar con el continente europeo. Se esperan cuellos de botella y retrasos en los controles fronterizos en Calais, Dunkerque y Coquelles, así como a la llegada a Reino Unido.
La protesta de estos funcionarios fronterizos vinculados al Sindicato de Servicios Públicos y Comerciales de Reino Unido atiende a la búsqueda de unas mejores condiciones laborales. Un escenario que promete afectar al transporte de mercancías por carretera, por ferrocarril y por vía marítima no sólo el 28 de abril, sino también en las jornadas sucesivas. De hecho, los turnos afectados por la protesta no sólo son los del 28, sino también los primeros del día 29 de abril.
Esta protesta supone otra piedra más en los servicios internacionales de tráfico de mercancía por carretera con Reino Unido, todo en un escenario en el que ya de por sí se ha complicado mucho la cadena de suministro con las islas británicas tras el Brexit. De hecho, recientemente Reino Unido ha confirmado nuevos requisitos y requerimientos para la importación de distintos productos animales y vegetales.